SEGÚN BLOOMBERG
En menos de cinco años trabajando en Cisco Systems Inc.,
acumuló 240 horas de tiempo libre remunerado. Es un mes y medio que Whalen
podría haber empleado descansando en su casa o relajado en la playa. Eligió, en
cambio, la oficina, donde tenía mucho que hacer.
Poco después de abandonar ese trabajo, habló con un amigo
con una cuenta de atraso de vacaciones similar: ?¿No sería fantástico poder
usar una parte para comprar un hotel y billete aéreo y después tomarse dos
semanas enteras de vacaciones?? dijo su amigo.
El comentario dio una idea a Whalen. Tres días más tarde,
estaba promocionando PTO Exchange, una compañía que cofundó con Todd Lucas para
que los trabajadores puedan aprovechar el valor en efectivo de sus días,
semanas y meses de tiempo libre no utilizado. La empresa emergente con sede en
Seattle, a la que acaba de suscribirse su primer cliente empleador, permite a
los trabajadores canjear el tiempo libre pago no utilizado por viajes o aportes
a los planes de retiro 401(K) y las cuentas de ahorros de salud.
?Con tanto tiempo inutilizado, nos dimos cuenta de que es un
beneficio que se debe redefinir?, dijo Whalen.
TRABAJAR CON
ESFUERZO, NO JUGAR
En materia de tiempo libre, los estadounidenses están en una
situación perversa. Estados Unidos es el único país avanzado que no tiene
licencia paga obligatoria. En la mayoría de los países europeos, los
trabajadores tienen derecho por ley a unos 20 días o más de vacaciones al año,
según un informe del Centro de Investigación Económica y Política. Los suecos
tienen derecho a cinco semanas, en tanto los trabajadores franceses reciben no
menos de 30 días.
En Estados Unidos, en cambio, casi un tercio de los
trabajadores no tiene licencia paga por enfermedad, y más de un cuarto no
recibe tiempo de vacaciones, según la Oficina de Estadísticas del Trabajo (BLS
por su sigla en inglés).
Esto ha llevado a estados como California y ciudades como
Nueva York a exigir a los empleadores otorgar tiempo pago por enfermedad. Por
su parte, los dichosos que tienen suficiente tiempo libre a menudo no lo
utilizan. Menos de la mitad de los trabajadores estadounidenses dijo que tomó
la totalidad o la mayor parte de sus días de vacaciones en los últimos 12
meses, y sólo 22% emplearon el grueso de su tiempo pago por enfermedad, según
una encuesta de la Universidad de Harvard, la Robert Wood Johnson Foundation y
National Public Radio que abarcó a 1.600 adultos empleados.
IGUAL SIGUEN
TRABAJANDO
Y no se trata sólo de las abejas obreras -la renuencia a
alejarse de la oficina se extiende con frecuencia también a los niveles
ejecutivos. Los estadounidenses van, en cambio, a trabajar enfermos, propagando
infecciones y sintiéndose y haciendo sentirse mal a todos los de alrededor. O
se agotan mentalmente no tomando vacaciones. Por consiguiente, millones de días
destinados a dar a las personas el indispensable tiempo libre se pierden o
terminan en los balances generales de las empresas para que los trabajadores
los hagan efectivo en un futuro.