Después de un par de meses de descanso, la ciudad cobrará vida nuevamente y regresaremos a la rutina habitual. El tráfico, las prisas y los apresurados horarios a los que nos habíamos desacostumbrado. El regreso a clases nos traerá de vuelta a nuestra vida acostumbrada, pero también puede ser el momento idóneo para los negocios.