Por Nilda Romero Ministra de la Mujer
Las formas de violencia hacia mujeres y niñas se hacen cada vez más presentes en los registros sus manifestaciones y la más extrema de éstas, el feminicidio, nos ha llevado como sociedad a asumir la existencia de este flagelo que persiste, que humilla, degrada, cercena derechos y mata mujeres.