Entre los años 1995 y 2011, la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) exportó energía a Formosa, Argentina, a un precio inferior al convenido inclusive por la misma entidad, asegura el ingeniero Javier Villate. Dichos datos figuran en la memoria y balance de la ANDE y se estima que en ese lapso la entidad perdió US$ 230 millones por la diferencia en su tarifa.
Las empresas de electricidad de Argentina involucradas en el tema serían Copel y Edefor, esta última es propiedad de Sergio Tacelli, que también practicó maniobras dudosas en Acepar. Tacelli accede a los permisos en la era Menem, que se caracterizó por ser una época de privatizaciones y altísima corrupción en el vecino país.
“En Paraguay nosotros teníamos el precio promedio de US$ 15 por megawatt/hora, fijado por la propia ANDE, sin embargo era vendida a US$ 12 megawatt/hora, lo que nos lleva a la conclusión de que la ANDE subsidió el desarrollo del norte argentino a través de la provisión a Formosa”, indica el experto a 5días.
LEY DE ELECTRICIDAD
Al consultarle el motivo de la diferencia entre las tarifas, la alta disfuncionalidad del organismo monopolizador del recurso, el especialista indicó que nuestro país carece de una ley que regule y, a la vez, permita el auge de empresas serias que puedan competir y abastecer de electricidad de calidad y a un precio justo. Dicho lo cual, la desmonopolización es un tópico fundamental para conseguir ese objetivo, ya que la monopolización trae consigo circunstancias propicias para el uso y el abuso de ciertas ventajas en el sector. Una vez liberado el mercado, el mercado emitiría señales que serían captadas por inversores que invertirían en infraestructura y darían lugar a un mejor servicio y un mejor rendimiento final de la energía eléctrica, asimismo sería una discusión bizantina la de plantear el reajuste de tarifas como se está haciendo actualmente, ya que con una buena legislación sobre el usufructo de la electricidad se debería actualizar los precios con normas claras y justas para todos cada cuatro o cinco años.
FIJACIÓN DE PRECIOS
A pesar de que el 99% del mercado es ocupado por la ANDE, ésta tiene un 3,7% de rendimiento negativo, es decir, es una empresa que obviamente no tiene proyecciones a futuro y eso no es nada atractivo para inversores serios sino más bien para los informales.
El criterio con el cual la ANDE vende su producto al paraguayo se basa en el costo medio de generación, al que adiciona los costos de transmisión y de distribución. Sin embargo las empresas distribuidoras de energía eléctrica del interior de nuestro país (Clyfsa y Colonias Menonitas) se manejan con el mismo criterio y el costo por unidad medio de la energía que pagan a la ANDE incluiría el costo del transporte, monto que fue superior al pagado por las distribuidoras foráneas que, en promedio, fue de 90 G/kWh en el mismo lapso, también proveen de un mejor servicio a pesar de que la ANDE les vende a US$ 160 MW-h, precio muy por encima de los US$ 15 MW-h que debería de ser, concluyó.
