Una de las cosas más difíciles de explicar para nosotros que todavía sufrimos la peor de la dictaduras – la ignorancia- es cómo países como Corea han podido transformar esos largos periodos autoritarios en valores sobre los que hoy construyen desarrollo. Aquí todavía en la prensa se recuerda el pasado autoritario del General Park cuya dictadura sentó las bases del progreso de esta Nación por 18 años. Del modelo cooperativo en lo que asentó su gobierno dando a sus líderes locales cemento y semillas en las formas asociativas conocidas como Saemaul Undog. Unas villas, donde el esfuerzo colectivo fue construyendo esta Nación no exenta de problemas pero con resultados altamente positivos si comparamos con los nuestros de dictaduras más longevas pero con escasísimo aporte al desarrollo.