Por Juan Pablo Fernández Enviado Especial TAIWÁN
Durante una semana, he tenido la oportunidad de conocer un país que ha pasado a tener una realidad económica peor de la que tuvimos en nuestros peores momentos económicos, pero que gracias a la tenacidad, determinación y visión de la clase política y económica de esta Isla, han podido ser un ejemplo de economía mundial sobre la base de trabajo duro, un control riguroso de la gestión pública y una idea de prosperidad que han sabido trabajar en todos los estratos sociales, con un norte en la educación, para estar donde se encuentran actualmente dentro de los primeros países de economías fuertes, incluso sobre las amenazas permanentes de su vecino, China Continental.