Desde chico veía a su madre andar acompañada de una guitarra por la casa, en las reuniones familiares y peñas. También recuerda que de la mano de su abuelo la música siempre estuvo presente en su vida, pero ninguno de los dos se dedicaba de lleno al mundo musical.
“Yo me dedico a la música desde los 12 años, miraba a mi mamá y fue algo que cada vez estaba más presente. Al comienzo fue un hobby que llevaba a cabo en el colegio o con mis amigos, pero después le fui dando más importancia y antes de terminar el colegio decidí seguir la música para un camino de toda la vida”, rememoró Acho Laterza sobre sus inicios.