Confieso que les tengo miedo a las arañas. Soy capaz de hacer una escena digna de una película de terror si me encuentro con alguna de ellas. Tiempo atrás lo demostré en la casa de una amiga pegando gritos desaforados cuando vi un ejemplar paseando por su jardín. Por suerte, su hijo me contuvo: “No tiene nada de malo sentir miedo, siempre y cuando no te dejes vencer”, me dijo en un arranque de sabiduría infantil. “¿De dónde sacaste esas palabras?”, le pregunté, curiosa. “¡Tía, eso dice el Capitán América!”, me contestó como si fuera la persona más desactualizada del planeta. Ese niño tenía razón: debía aprender más de los superhéroes y, sobre todo, de las palabras que ellos emplean y que a mí, por lo que escuchaba, me podían servir de terapia.
Columnas
Las superpalabras
Hay palabras más poderosas que otras. Está comprobado que decir a menudo “gracias” nos trae salud y felicidad.