De un hobby familiar a la concepción de un negocio, fue la transición de Patí Pamí que nace de la mano de la joven Patricia Aquino que al culminar la universidad se propuso dedicarse netamente a la tarjetería.
“Me apasiona bastante el rubro de la papelería social, me llena de satisfacción la expresión de alegría y emoción de las personas al recibir las invitaciones para ese día tan especial. La suma de todo fue lo que me llevó a emprender y abrir las puertas a mi sueño de montar una Tarjetería Social”, relató Patricia.
Así mismo, comentó que si bien desde adolescente realizaba invitaciones para la familia, fue el empujón de dos amigas, Ruth y Lizi, lo que la llevó a dar un nombre al negocio y empezar a ofrecer sus servicios.