Es una pena que el Papa, con su autoridad en el mundo católico, otorgue apoyo moral a ciertas corrientes fundamentalistas que se mueven en un ambiente que combina ignorancia, necedad y ceguera ideológica. Sostener que criar ganado y alimentar a la humanidad es una amenaza para la vida y el equilibrio ambiental es absurdo. Bergoglio viene de un país que ha hecho de la ganadería una cadena de valor que es marca registrada mundial. El Paraguay ha evolucionado también en esa dirección y está probado -al menos para mentes abiertas al pensamiento racional- que es posible cultivar campos y producir proteína animal en perfecta armonía y estabilidad medioambiental. Sin embargo, en su carta apostólica del lunes pasado, Francisco instó a los jóvenes a comer menos carne, poniendo este alimento esencial en la evolución de la humanidad a la altura de consumo superfluo. Como dicen en portugués, agua na boca para veganos y ambientalistas extremos.
Editorial
Economía sin dogmas ni ideologismos
Sostener que criar ganado y alimentar a la humanidad es una amenaza para la vida y el equilibrio ambiental es absurdo. Sin embargo, en su carta apostólica del lunes pasado, Francisco instó a los jóvenes a comer menos carne, poniendo este alimento esencial en la evolución de la humanidad a la altura de consumo superfluo. Y eso es un absurdo insostenible. El mundo real marcha por otro andarivel.