La producción arrocera enfrenta un panorama muy comprometido para el próximo ciclo productivo a punto de iniciarse. Las cifras correspondientes al primer semestre de exportaciones ubican al sector arrocero con una retracción del 4% en sus envíos. ¿Causas? Un 30% de la anterior zafra se perdió por sequía y otra parte por la huelga en la Receita Federal de Brasil que bloqueó el paso de transportes. Los arroceros ya han cerrado sus costos para la próxima campaña y las perspectivas no son alentadoras. Con la abrupta subida del gasoil en mas de un 90% en seis meses y del 300% en la tonelada de fertilizantes importados, es poco o nada lo que el sector puede hacer para achicar costos en una campaña que deberá iniciarse hacia mediados de agosto próximo. Ni la caída de precios de fertilizantes ni la baja en el precio del gasoil incidirían positivamente en el cuadro de costos de los productores. Por otra parte, tampoco son optimistas las previsiones de lluvias para los próximos seis meses, lo cual cierra un cuadro de perspectivas extremadamente desalentador. En la zafra 2020-2021, se cubrieron 160.000 hectáreas con una producción aproximada de 1.100.000 toneladas. Brasil, México y Chile, en ese orden, fueron los principales destinos de exportación que se llevaron el 76% de las colocaciones.