No es noticia que el acuífero Patiño está contaminado y en proceso de extinción. El Patiño es un depósito natural de agua dulce de 1.173 kilómetros cuadrados que yace a 300 metros de profundidad. De él sacan agua unos 3.000 pozos de ESSAP y aguateras privadas, además de un sinnúmero de otros pozos, registrados o no. Según un estudio de la UNA, las lluvias reponen al acuífero unos 176.000 metros cúbicos pero los humanos extraemos 250.000. Matemática simple. Déficit puro y en aumento. Además, como la política de saneamiento ambiental es históricamente un desastre, de los 19 municipios esparcidos sobre el acuífero sólo el 16% -incluida Asunción- tiene sistema integral de alcantarillado sanitario. El 84% de los hogares tira sus aguas negras a pozos ciegos. Eso significa infiltración directa de coliformes fecales al acuífero, cuyas aguas presentan una contaminación del 70% según las perforaciones controladas por SENASA.
Editorial
Un acuífero en vías de extinción
Entre la escherichia coli de la mierda y los tóxicos de las gasolineras, el Patiño agoniza por sobreexplotación y contaminación.