En medio de la incertidumbre, un 15 de julio inauguraron el local y el nombre de la empresa viene del guaraní que significa caradura. “Elegimos ese nombre de marca, ya que creemos firmemente que el ‘Rova’ata’ no siempre es una connotación negativa, creemos que es el que se anima, el que por más que le digan no sigue buscando el sí, y así logra sus objetivos”, recalcó Duarte.
Emprendedores
Sabor casero conquista a oficinistas
Como profesional gastronómica, Pamela Duré (31) pensaba en el proyecto de emprender un negocio que tenga que ver con la comida. Luego de mucho pensar y plantearse la idea, junto a su pareja Óscar Duarte (34) decidieron embarcarse en lo que hoy se conoce como Rova’ata Copetín. “La idea de ser ‘nuestros propios jefes’ nos asustó un poco al principio, pero es eso lo que nos pone a prueba diariamente y nos hace crecer mucho más”, sostuvo la emprendedora.
