He visto planes estratégicos tan bien definidos, con tanta creatividad, formulados con énfasis en los resultados y en los recursos, pero que no han llegado a alcanzar los resultados esperados, porque la ejecución de dichos planes ha chocado con paredes que muchas veces parecen insalvables. Una de ellas, es no contar con el personal ejecutivo, gerentes de línea y supervisores, capaces de acompañar a la alta dirección, con las capacidades y el compromiso que tanto se requiere en el desarrollo de los negocios modernos. El tema de liderar equipos de trabajo, se ha transformado en un dolor de cabeza, para empresas que requieren contar con mandos medios capaces de hacer que las cosas se hagan y al mismo tiempo, que se hagan bien. Por ello he querido reflexionar esta semana, en la importancia de contar con ejecutivos y supervisores de alto nivel, cuáles han de ser sus competencias, conocimientos, habilidades y actitudes, para acompañar el Plan de Desarrollo corporativo y al mismo tiempo, comprometer a las bases en alcanzar las metas y objetivos.