Con un comprensible pero insostenible mensaje de optimismo, el nuevo presidente de la telefónica estatal pronosticó mejoras en sus servicios. El anuncio hasta podría ser positivo. Más no podría caer la empresa “privatizada”.
Con un comprensible pero insostenible mensaje de optimismo, el nuevo presidente de la telefónica estatal pronosticó mejoras en sus servicios. El anuncio hasta podría ser positivo. Más no podría caer la empresa “privatizada”.