Hablando con jefes de proyecto, me di cuenta de que muchos desconfían y, hasta les da un poco de miedo, esta herramienta de procesamiento del lenguaje natural.
“¿Puede reemplazar mi trabajo?”, se preguntan muchos. Pero quiero decirles algo, ¡tranquilos! No se pongan en modo pánico, mejor pongámonos en modo oportunidad.
Las herramientas como ChatGPT no van a reemplazar a los humanos.