Es usual que dueños de empresas familiares me consulten sobre el proceso de sucesión de gestión en las estructuras organizacionales, pues su preocupación principal es la de asegurar herramientas de sostenibilidad para proteger el patrimonio familiar y cuidar la unidad de los miembros de la familia.
Los fundadores o dueños de las empresas familiares, generalmente, quieren que los negocios sean un legado para las siguientes generaciones y para ello se deben instalar medidas de eficiencia, tanto en la toma de decisiones como en la ejecución de la estrategia.
En ese sentido, a fin de construir acuerdos oportunos y evitar focos de conflictos futuros podría ser útil conocer más y mejor sobre el famoso Protocolo Familiar. Un acuerdo impuesto o con excesivos tecnicismos suele ser de difícil implementación en el seno de las familias empresarias, siendo ideal contar con un traje a medida construido a partir de conversaciones sinceras y profundas.