En 2022, las compras públicas involucraron el 11% del presupuesto general de la Nación (PGN) con un negocio global de US$ 1.495 millones. De esa fiesta, las mipymes apenas arañaron el 7% en lugar del 20% del total de adquisiciones que, al menos en teoría, está reservado para el sector que mueve casi el 90% del empleo nacional. ¿Qué falló?
Editorial
Abordaje holístico al universo mipyme
A las micro, pequeñas y medianas empresas se les ha agregado en forma explícita, en los últimos tiempos, una debilidad más: carecer de capacidad para ser proveedoras del Estado, un negocio que ha ido en constante crecimiento en los últimos 10 años.