“Si un lugar está mal ventilado, hay que dar la vuelta y marcharse”. Esto no se dijo en cualquier parte sino en el Colegio de Ingenieros de Servicios de Construcción de Reino Unido. Fue una de las primeras recomendaciones frente a la explosiva expansión del COVID 19 hacia marzo y abril del año pasado. El resultado es un vademécum de indicaciones para construir y habilitar espacios de trabajo que deban estar cerrados.
Editorial
Buses de Asunción, pasillos de la muerte
Usted no puede faltar al trabajo y debe padecer un viaje de una hora dentro de una verdadera olla a presión llena de virus. La gente se apiña para subir y se encuentra con un ambiente cerrado, lleno de gente respirándole a 20 centímetros de su rostro y, en algún rincón, uno que tose. ¿Qué hace? ¿Da media vuelta y se marcha?. No, sigue viaje sabiendo que ese día se puede estar firmando su sentencia de muerte.