Deberíamos creer que el Presidente Abdo Benítez hablaba en serio cuando dijo que “nadie quiere ser ministro de un Gobierno que puede irse la semana que viene”. A estar por algunos nombramientos, tal parece que está raspando el fondo de la marmita y que se ha quedado sin opciones, por ejemplo, en el Ministerio de Educación, quizá la más desafortunada de las carteras en este enroque de ministros. De un fiscal que demostró indiferencia pasa ahora a un empresario de la educación universitaria y de la provisión de servicios al Estado.
Editorial
¿Raspando la olla, Sr. Presidente?
Desde su nombramiento como titular del MITIC y ahora del MEC, Brunetti está en rumbo de colisión con la ley de la Función Pública.