No vale la pena perder el tiempo ocupándonos del paro, huelga o cómo se llame el maltrato cotidiano que recibe la comunidad de viajeros del Area Metropolitana, con sus 2.582 kilómetros cuadrados de superficie y 2,8 millones de habitantes. Todos los santos días hay -dentro de esta extensión equivalente a Luxemburgo- algún paro parcial, demoras, falta de servicio e incomodidades propias de una flota de autobuses gran parte obsoleta, con unidades en las que la gente se embute dos veces por día para ir y venir al y del trabajo.
Editorial
Transporte eficiente, un espejo lejano
La cuestión ya no pasa por si la huelga es legal, si hay que subir el pasaje y eliminar el subsidio, o poner al día el subsidio y dejar el pasaje como está, etc. La cuestión de fondo está en cuándo algún gobierno en este bendito país se decidirá a tomar el tema transporte con la seriedad que requiere una clientela de más de un millón de personas que cada día intenta llegar entera al trabajo.